«Nuestra vida no existe por casualidad, no es una casualidad. Dios ha querido mi vida desde la eternidad. Soy amado, soy necesario. Dios tiene un proyecto para mí en la totalidad de la historia; tiene un proyecto precisamente para mí. Mi vida es importante y también necesaria. El amor eterno me ha creado en profundidad y me espera». (Benedicto XVI. Discurso 25 de marzo de 2010)
¿Cuándo nos tenemos que confesar?
La respuesta es sencilla: cuando estamos en pecado mortal. Que sí, que hay pecados mortales que nos separan totalmente de Dios y de su Iglesia. Y por eso son pecados, porque son mortales. Algunos actos son pecados porque son malos. Por lo tanto, una cosa no es pecado por una decisión arbitraria de nadie, sino, porque sencillamente es mala y nos aparta de Dios y también de los demás, aunque no nos demos cuenta.
Y, ¿cuándo más nos debemos confesar? La respuesta también es sencilla: en los momentos importantes del año litúrgico y en los momentos importantes de nuestra vida cuando vamos a recibir algún sacramento que nos exige estar en gracia de Dios para recibirlo de forma más eficaz.
Así que, estamos en Adviento, es tiempo de preparación de nuestro corazón para acoger al Hijo de Dios y eso también exige «hacer limpieza a fondo» de nuestro interior y para eso es necesario acercarnos al sacramento de la penitencia para que se nos perdonen los pecados mortales, pero también los veniales, que poco a poco van lastrando nuestra vida sin casi enterarnos.
Como todos los años, por Adviento y Cuaresma organizamos una celebración penitencial para que nos ayude a acercarnos a este sacramento. Como es costumbre vendrá un sacerdote de fuera, en este caso será D. Daniel, párroco de Albeiros en la ciudad de Lugo, para dirigirnos una pequeña meditación sobre el perdón y ayudarnos con el examen de conciencia, pero sobre todo para acogernos en el nombre de Dios, escuchar nuestros pecados y darnos el perdón sacramental. La celebración penitencial la tendremos este viernes, día 17, a las 6 de la tarde.
Por supuesto, que yo siempre estoy dispuesto para todo el que se quiera confesar en cualquier día del año. Sabéis que me podéis encontrar todas las tardes de lunes a sábado por la iglesia parroquial o en el despacho.
Evangelio 2022
Ya tenemos los ejemplares del Evangelio para el año 2022. Se puede recoger en la iglesia al final de las misas. Como siempre lo tenemos en doble formato: letra grande y edición de bolsillo.
Catequesis de niños y película de animación sobre la Navidad
La catequesis de niños es la actividad que más se vio afectada por mi situación personal de estos últimos días. Este año no hay catequistas y recae todo sobre mí, por lo tuvimos que cambiar un poco los planes durante estas últimas semanas del año.
Por eso, y ya que está a las puertas la Navidad, pensé que sería bueno volver a poner la película de animación Se armó el belén. La proyectaremos los días 15 y 22 de diciembre a las 6 de la tarde.
A esta actividad puede asistir quien quiera. Está pensada para los niños que se preparan para la primera comunión, pero pueden asistir los demás niños y también los adultos.
Recogida de alimentos
En los supermercados del pueblo están ya las cajas preparadas para que podamos dejar nuestras aportaciones. Como sabéis, lo mejor es dejar alimentos no perecederos, pero también se aceptan productos de limpieza e higiene.
Gracias a Dios, en nuestra zona no hay muchas familias a las que ayudar, así que, lo que nos sobre lo enviaremos al Comedor San Froilán o a alguna parroquia de la ciudad en la que hagan distribución de alimentos.
Para los que no sois de aquí, pero que queréis colaborar podéis hacerlo enviando vuestros donativos a la cuenta o al Bizum de Cáritas interparroquial de Fonsagrada. A veces también necesitamos tener algo de dinero para atender necesidades urgentes, sobre ayudas para el alquiler.
Resumiendo
Oraciones
La semana pasada falleció Domingo, padre de Marga, de la parroquia de Meira y miembro de esta familia del Falando Baixiño. Rezamos por el eterno descanso de su padre y por toda su familia.
Y ya veis que también tenemos que seguir rezando por el final de la pandemia. La cosa de alarga demasiado.
Madre del Cielo, tú brillas
como signo de consuelo y de firme esperanza.
En tus manos ponemos nuestra vida
confiando en tu materna protección.
Contigo y en nombre de Jesús, el Hijo de Dios,
elevamos nuestra humilde oración al Padre
y pedimos por los enfermos,
por los que están solos
y por todos los que en estos días
entregan su vida a favor de todos.
María, Salud de los enfermos,
vuelve hacia nosotros tus ojos misericordiosos,
atiende nuestras súplicas y protégenos de todo mal.
Amén.