DANIEL GARCÍA | PÁRROCO DE ALBEIROS Y CANÓNIGO DE LA CATEDRAL

Arde Lucus et Corpus Christi

junio 18, 2022 · 17:31 1

Acabamos de celebrar el Arde Lucus. Elegantes disfraces de romanos. Provectos senadores. Orgullosos y elegantes castrexos. Gladiadores. Sumisos escolares bajo los más variopintos lábaros cristianizados. Ritos equívocos como bautizos, bendiciones, fuegos sagrados… Lucus bajo el águila imperial, aurigas y tropas, campamentos y templos, ofrendas y dioses. Y los héroes legendarios del Medulio convertidos en resignados y mansos vecinos.

Hasta aquí lo lúdico, la simulación. El recuerdo. Hasta aquí la historia a recordar, el legado que agradecer. La Roma más fecunda y autora de una cultura.

Ahora llega la fiesta, el encuentro humano, la fe. Aquello es externo, tumultuoso. Lo que llega es vivencial, profundo. Son raíces con frutos de eternidad. Es historia viva, presente y creadora del Lugo más actual. Celebramos la fiesta más antigua y significativa de la Ciudad del Sacramento: Corpus Christi.

Después de dos años largos, en los que hemos estado aislados por horas interminables, nuestra alma pide a gritos, de nuevo, encuentros con corazón. Y Jesucristo en la eucaristía espera ese encuentro del que le ama y cree. Espera encuentros con cada lucense. Vamos a su encuentro.

La Plaza de Santa María, cual vasija nutricia, acoge este domingo, a las 11, la Eucaristía que terminará con la procesión en la que el Señor en el viril recorre nuestras calles. Resuena “Cantemos al amor de los amores, Dios está aquí”.

Es el amor expansivo. El Cuerpo que se da en Caridad a todos. Como diría Madre Teresa de Calcuta, “Aquí Jesús está en forma de pan. Pero en el mundo de la miseria, en los cuerpos heridos, en los niños y abandonados es en donde también lo vemos y tocamos”.

Día de Cáritas. Propuesta por la fraternidad en la que ofrecemos nuestro compromiso humano y cristiano. La fiesta del Corpus Christi no contabiliza a los miles de visitantes a nuestra ciudad, ni a los cuantiosos beneficios económicos que reporta, ni…Nos invita a soñar la grandeza profunda de la fe que comporta alimentar el fuego del horno interior en el que se enciende y se nutre la caridad. Nos exige acercarnos a los pobres y oprimidos, a ponernos del lado de la defensa de la dignidad de toda persona. “Felices los cristianos a los que la fe les sale por las obras como sale de los pulmones la respiración” (Martín Descalzo). Sí, felices los que llenan su vida de la sabiduría del amor, de la caridad.

Este Corpus queremos apostar por construir nuestras vidas sobre las columnas del amor, la justicia, la paz, la sencillez, la fe. Actitudes que no recortan la vida, sino que la multiplican. No la recortan, la fecundan. Porque “los verdaderos infelices son los que se pasan la vida diciendo yo y siempre yo” (Follerau).

Arde Lucus da la mano al Corpus Christi. Escribió María Rosa de la Vega Araujo:

Dios y Lucus en pacto inmemoriado

Pan Eterno en las mieses de su Historia,

del misterio blasón y ejecutoria,

ostensorio de Amor privilegiado,

Hoy el Corpus celebra emocionado

-con la humildad del polvo y de la escoria

vestida de luceros, sol y gloria-

el pueblo que en Viril has transformado…

Daniel García García

Párroco de Albeiros y canónigo de la Catedral

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